Listas de espera: nueva prioridad
Pasaron las cuarentenas, bajaron los casos y las camas UCI dispuestas para los pacientes Covid-19 se deben “desarmar”. ¿La nueva prioridad? Disminuir las listas de espera de las cirugías que quedaron pendientes en medio de la pandemia.
Debido a la creciente preocupación de aquellas personas que han postergado cirugías importantes, además del aumento en la espera de tratamiento para pacientes oncológicos, es que el Ministerio de Salud indicó que hospitales y clínicas deben redestinar nuevamente sus camas. Esta vez, para los que se han visto postergados producto de la pandemia.
Y es que en la actualidad el 24% de las camas de alta complejidad están siendo utilizadas por pacientes con Coronavirus. Es decir, uno de cada cuatro cupos de cuidados intensivos (UCI).
Por esta razón -y ante la cifra de contagios que se mantiene a la baja- es que se acordó flexibilizar la medida de dejar las camas UCI y de ventilación mecánica sólo para pacientes graves por Covid-19.
Así, pabellones, urgencias y salas de recuperación, que variaron ante la exigencia del Minsal, hoy pueden retomar sus dotaciones originales.
Recordemos que en marzo 2020 la red integrada público-privada pasó de una dotación de 1.313 camas, a un peak de 4.544 cupos UCI habilitados en mayo 2021. De estas, 2.621 corresponden a la región Metropolitana.
Pero ahora, la situación es diferente. Los casos han disminuido y la positividad, durante la última semana, se ha mantenido en 0,8% a nivel nacional. Entonces, ¿llegó la hora de los postergados? La respuesta es sí.
El mandato, que fue publicado en el Diario Oficial, explica que “el mejoramiento de las condiciones epidemiológicas que motivaron la dictación de las resoluciones precedentes que mandataban el aumento de camas críticas hace razonable que estas sean dejadas sin efecto, para hacer frente a otros problemas de salud que han sido postergados producto de la pandemia”.
¿Y qué significa? Que los directivos de los servicios de salud podrán disminuir las camas UCI “con el objetivo de hacer frente a las nuevas necesidades de salud que existen en sus redes y la disminución de la lista de espera”, explican.
Pandemia 2.0
El decreto responde a mejorar los indicadores, pero también hace referencia a la existencia de una “Pandemia 2.0”,en donde pacientes crónicos descompensados no han logrado acceder a una atención oportuna. Peor aún, muchos de ellos aún no han sido diagnosticados producto del bloqueo que generó el Coronavirus en dichas atenciones.
Luis Castillo, excoordinador de la red de salud público-privada, agregó que “este decreto implica que hospitales y clínicas puedan reducir el número de camas críticas y poner en marcha la resolución de la lista de espera ambulatoria y quirúrgica”.
Cabe mencionar que estas acciones se deben revisar cuidadosamente debido a que los médicos, especialmente los cirujanos, verán incrementada su actividad, lo que implica tener espacios operativos que permitan una óptima recuperación de los pacientes.
Fuentes:
- El Mostrador
- La Tercera
¿Cómo cuidarse de una ola de calor?
