Súper Mamis ¡El desarrollo profesional y la maternidad sí son compatibles!
Para muchas mujeres el convivir con el trabajo y la maternidad, puede resultar más que estresante. Lograr compatibilizarlo, peor aún. Pero lo cierto está en que muchas madres logran sobrellevar múltiples actividades, convirtiéndolas en ‘Super Mamis’ o las llamadas ‘Mamás pulpos’ que son capaces de hacer mucho más de lo que creían.
¡Sí, se puede! Ser madre y lograr un desarrollo profesional. Y ser dueña de casa, esposa, hija, hermana, tía…amiga. Así es, las ‘Súper Mamis o Mamás pulpos’ explotaron con todo el esplendor, durante la pandemia vivida por el Covid-19.
Muchas mujeres con el sólo hecho de pensar en lidiar con el trabajo de oficina y la casa, las hacía pensar en algo absolutamente imposible.
Lo cierto es que la ficción, superó la realidad, ya que no sólo pudieron compatibilizar ambos temas, sino que, además, conjugar con otras actividades y factores adicionales.
¿Cómo compatibilizar el trabajo en la sociedad y ser madre?
En Chile en el 2020, según cifras de la CEPAL (Comisión Económica para América Latina) la participación laboral femenina alcanzó un 46% en la cual incluyó a muchas madres.
Desde siempre se ha sabido que la mujer es la que enfrenta con mayor participación los distintos roles y – a su vez enfrenta con gran dificultad- el que su trabajo sea valorado, ya que para muchos la preocupación que tienen por sus múltiples tareas, las hace dejar las cosas a medias o sin terminar, sin destacar todo lo que han logrado realizar y está hecho.
Según la psicóloga clínica del Centro de Salud Alejandro del Río Fabiola Venegas “es difícil compatibilizar ambos roles, pero no imposible. Lo importante es que después de tener un período de adaptación, la mujer logre incorporar e integrar la maternidad al conjunto de su vida.
Lo ideal es encontrar un espacio adecuado para ser mamá sin abandonar las otras actividades que son parte de su vida, es decir, si siempre fue resolutiva, deportista, independiente, amiga de sus amigas y trabajadora, debe seguir siéndolo’.
Según la experta, es importante entender que es parte de un proceso donde se deben ajustar los tiempos y reordenar las tareas.
Si antes salía todas las semanas con las amigas, ahora quizás sólo podrá hacerlo efectivo cada 15 días.
Lo importante, según recalca la psicóloga es entender que la vida cambió con la llegada de los hijos, y que a pesar de que no era como antes, que no existe un tiempo completo y disponible para ella, no tiene que ver con que sea malo.
Al contrario, será distinto y con experiencias totalmente nuevas que generarán un bienestar diferente sólo que ‘ahora con un hijo’.
‘La mejor mamá’
‘Ser la mejor mamá’ para muchas es un desafío y, además es parte de la culpa y preocupación que sienten las mujeres, al dejar de lado a sus hijos por temas laborales. Por la misma vereda, también están aquellas madres que sienten esa misma culpa y pena por no lograr desconectarse de los hijos cuando están en el trabajo.
Para poder sobrellevar esta situación, los expertos aconsejan que las mamás deben decirles a los niños las cosas.
Es decir, entregar claridad y seguridad la información, ya que ayudará tanto al hijo y la madre para que todos puedan estar felices y tranquilos realizando sus actividades.
‘Culpable soy yo’
Por otra parte, la manera de manejar la culpa depende de cada persona, pero en la mayoría de los casos es aconsejable pensar que los niños estarán felices si la madre está dichosa y plena, lo que generalmente conllevará a que la mujer incluya actividades personales, lejos del mundo de los hijos pero que son necesarias para quebrar la rutina y conseguir estabilidad.
“Es clave poder pensar en uno misma identificar las cosas que nos hacen bien y son necesarias para el desarrollo de un buen trabajo. Para una madre, jamás sacará de la mente a sus hijos, pero el estar permanentemente con ellos, también logra ser desgastante”, explicó la psicóloga Fabiola Venegas.
¿Cómo lograrlo? Para compensar la ausencia, en ocasiones especiales es bueno llegar con algún premio, pero ¡ojo¡ sólo de vez en cuando, ya que de lo contrario el niño se acostumbrará a los premios y estará esperando por ellos siempre.
También existe la preocupación de aquellas madres de cómo proteger y guiar a sus hijos, mientras ellas trabajan.
Un pensamiento recurrente pero que, para los especialistas, debe erradicarse y tomarse en cuenta que los niños aprenden primero por lo que ven, segundo por lo que escuchan y tercero por lo que uno les dice.
Esto quiere decir que el pasar tiempo junto a los hijos y estar físicamente con ellos sirve, pero no significa que sea sinónimo de una buena comunicación.
Para la psicóloga clínica es importante que los tiempos que “dediquemos a los niños sean de calidad, aunque sean breves. Esto significa tener una escucha activa frente a lo que nos cuentan, responder a las inquietudes que nos plantean y estar presentes en su vidas. Jugar con ellos y mantener una comunicación fluida”.
Parte de la crianza es fundamental generar momentos de confianza, tener reglas estables y ser consistentes, lo que se logra de igual manera estando con los niños en la casa o con la mamá trabajando.
Hoy la mujer trabajadora tiene dos trabajos, el remunerado y el del hogar. Es importante tomar conciencia de la corresponsabilidad de las tareas del hogar, para que así la madre no sienta ni experimente en la disyuntiva permanente de desarrollarse profesionalmente o tener una familia.
El trabajo se realiza en equipo. Pero ¡sí, se puede! Y la multiplicidad de roles es parte de el ser mujer.
¿Cómo cuidarse de una ola de calor?
