Nódulos en el cuello: ¿es cáncer de tiroides?
Si a través de un examen, o tal vez con sólo palparlo, sentimos un bulto en la garganta que, a ratos, causa molestias o sensibilidad al tacto. ¿Puede ser un nódulo? ¿Es maligno? ¿Debo consultar con un especialista? Responde todas estas dudas a continuación:
Los nódulos tiroideos son bultos sólidos o llenos de líquido que se forman al interior de la tiroides, una glándula pequeña ubicada en la base del cuello.
Si bien, la mayoría de estos nódulos no son graves y no presentan síntomas, existe un pequeño porcentaje que sí puede ser señal de cáncer de tiroides, por lo que es importante consultar a la brevedad con el fin de descartar esta posibilidad.
¿Cómo se descubre un nódulo en la tiroides?
Por lo general, se descubren cuando un médico de cualquier especialidad solicita exámenes de rutina, incluyendo una ecografía de tiroides. Sin embargo, también hay personas que tienen algunas molestias para respirar o tragar, así como sentir este bulto cerca de la garganta. Estas señales no son tan comunes, pero se describen como:
- Palparse el bulto.
- Notar una hinchazón en la base del cuello.
- Falta de aliento o dificultad para tragar.
Los síntomas de un nódulo en la tiroides también pueden tener relación a que estos secretan una tiroxina adicional causando:
- Pérdida de peso sin causa aparente.
- Transpiración excesiva.
- Temblores o nerviosismo.
- Latidos del corazón más rápidos o irregulares.
Como mencionamos anteriormente, la mayoría de los nódulos tiroideos no son cancerosos y no causan problemas, no obstante, es importante consultar con un especialista que solicitará distintos estudios para descartar un posible cáncer. Entre los más comunes están:
- Revisión de antecedentes médicos, personales y/o familiares.
- Examen físico en la misma consulta médica.
- Análisis de sangre (hormona estimulante de tiroides, T3, T4, tiroglobulina, calcitonina, antígeno carcinoembrionario y otros) para ver si la tiroides está funcionando bien o si existen alteraciones.
- Ecografía de tiroides que podría ayudar a determinar si un nódulo lleno de líquido o si es sólido. Este último tiene más probabilidad de ser canceroso. Según los resultados, se decide hacer o no una punción para posterior estudio histológico
Otros pueden ser una gammagrafía con yodo radiactivo, radiografía de tórax, tomografía computarizada, resonancia magnética o tomografía.
¿Y por qué pueden aparecer los nódulos en la tiroides?
Existen distintas causas o afecciones que provocan el desarrollo de nódulos en la glándula tiroidea. Algunos de ellos son:
- Crecimiento excesivo del tejido tiroideo normal: adenoma de la tiroides.
- Quiste en la tiroides.
- Inflamación crónica de la glándula tiroidea.
- Bocio multinodular.
- El mismo cáncer de tiroides.
- Deficiencia de yodo.
¿Y si me tengo que hacer una biopsia por aspiración con aguja fina?
Si el médico te indica la biopsia, no te preocupes, es común que se realice con el fin de asegurarse de que no haya cáncer.
Durante el procedimiento, que dura unos 20 minutos aproximadamente, el médico o el profesional de la salud a cargo insertará una aguja muy fina en el nódulo, extrayendo una muestra de sus células.
Esta muestra es enviada a laboratorio, las que serán analizadas microscópicamente con el fin de tener un resultado certero.
Tratamiento de los nódulos en la tiroides
Dependiendo de los resultados, los equipos médicos eligen el mejor tratamiento para el paciente. Por ejemplo, puede que los nódulos sean sólo líquido, por lo que el paciente deberá estar en seguimiento.
Sin embargo, si se está en presencia de cáncer de tiroides o de una lesión altamente sospechosa, los tratamientos incluyen:
- Cirugía o tiroidectomía total: se extirpan los nódulos y se analizan durante la misma cirugía. Si se confirma la presencia de cáncer, se saca la totalidad de la glándula tiroidea y se analizan los ganglios de alrededor de la zona, para ver si también están afectados. En caso de estarlo, también se deben extirpar.
- Yodo radiactivo: el cáncer de tiroides no requiere quimioterapia y, en su lugar, se utiliza yodo radiactivo que es más rápido y menos agresivo. ¿Cuál es el objetivo? Captar cualquier remanente de tejido tiroideo que haya quedado después de la cirugía, destruyéndolo y, así, evitando que aparezca un nuevo nódulo. Cabe mencionar que, durante su uso, la persona no debe estar en contacto físico con otras personas.
- Medicamentos posteriores a la cirugía: La tiroides produce hormonas necesarias para el buen funcionamiento de nuestros sistemas. Por ello, es necesaria la administración de la hormona sintética levotiroxina.
¿Cómo es la vida después del diagnóstico de cáncer de tiroides?
El cáncer de tiroides tiene buen pronóstico, especialmente cuando es diagnosticado a tiempo. Pese a ello, es normal sentir miedo y preocupación por lo que se viene después de la cirugía y/o el tratamiento.
Ahora, si se completó el tratamiento, es importante que sigas las indicaciones del especialista y que acudas a todos los controles posteriores. Aquí, seguramente tendrás que volver a hacerte exámenes y estudios por imágenes para darle el seguimiento correcto a la enfermedad. ¿Por qué? Para descartar la propagación del cáncer, así como cualquier efecto secundario.
Como todos los medicamentos o tratamientos, en especial aquellos relacionados al cáncer, causan efectos secundarios que pueden durar pocos días, hasta varios meses. Incluso, puede que algunos se presenten después de mucho tiempo. Por eso, ante cualquiera de ellos, es necesario que lo consultes con tu médico.
Dudas que puedes consultar:
- Calendario de pruebas y exámenes de seguimiento.
- Lista de posibles efectos secundarios inmediatos, tardíos o de largo plazo.
- Calendario de otras pruebas relacionadas con la prevención o el diagnóstico precoz de otros tipos de cáncer.
- Sugerencias de alimentación o actividad física.
- ¿Cuándo deberías consultar con urgencia?
Fuentes:
- Clínica Mayo
- American Cancer Society
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