Me duele el estómago

Fecha de Publicación: 30 Agosto 2021
Tiempo de Lectura: 6 Min.

¿Cuántos han ingresado a Google para buscar las causas del dolor estómago? Si en este momento te duele y no sabes qué hacer, aquí te contamos cuáles son los síntomas y motivos más recurrentes. Sin embargo, recuerda que si estos perduran, siempre es necesario consultar con un especialista:

El dolor abdominal puede tener distintas causas relacionadas con las comidas ingeridas o, incluso, a períodos de estrés que desencadenan problemas estomacales. No obstante, algunas son más graves que otras, por lo que es necesario estar siempre atentos a las señales que nos da nuestro cuerpo.

Causas más comunes del dolor de estómago:

 Síndrome de colon irritable

El síndrome de colon irritable es un trastorno frecuente que causa dolor en el abdomen, hinchazón, distensión, cólicos, gases y períodos de estreñimiento o diarrea.

Si bien, los motivos no son claros, se cree que en momentos de mayor estrés, aparecen. Por esta razón, el principal tratamiento es un cambio en la dieta, estilo de vida y niveles de estrés. En los casos más graves, se trata con medicamentos.

Reflujo gastroesofágico

El reflujo ocurre cuando el contenido del estómago regresa hacia el esófago, causando sensación de ardor en el pecho o, incluso, en la garganta.También se puede distinguir al presentar dificultad para tragar, regurgitación de alimentos, sensación de tener un nudo en la garganta o tos crónica.

Aquí, es importante consultar cuando el dolor de pecho se hace intenso (para no confundirlo con un infarto), los síntomas se hacen frecuentes, o tomas muchos medicamentos de venta libre para disminuir la acidez estomacal.

 Estreñimiento

Se caracteriza por tener como mínimo tres deposiciones por semana, lo que se suma a la dificultad para evacuar, que se puede manifestar durante varias semanas, o más.

Aunque es común en distintas etapas de la vida, existen personas que sufren de estreñimiento crónico, lo que dificulta la realización de las tareas diarias, por lo que es valioso encontrar un tratamiento.

 Intolerancia a la lactosa o alergias

La intolerancia a la lactosa y la alergia a la proteína de leche de vaca son dos trastornos distintos.

La alergia es una respuesta exagerada de las defensas (alergia), mientras que la intolerancia a la lactosa aparece cuando no se puede digerir adecuadamente el azúcar natural de la leche que se conoce como lactosa. Esta última genera dolor abdominal, gases, cólicos, hinchazón, diarrea, acidez, entre otros.

Intoxicación por alimentos

Se produce cuando se consumen alimentos contaminados por bacterias, virus o parásitos produciendo síntomas incluso unas pocas horas después de haber comido.

A menudo, se presenta con náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea. Si bien, la mayoría de las personas se recupera rápidamente, algunos necesitan hospitalización.

 Gastroenteritis

La gastroenteritis es una infección o una inflamación del revestimiento interno del estómago y el intestino delgado producida por bacterias, virus o parásitos presentes en las heces de un infectado (alimentos u objetos que se transmiten al entrar en contacto con ellos).

Los síntomas principales son dolor abdominal, vómitos, náuseas y diarrea.

 Indigestión

La indigestión, también conocida como dispepsia, es una sensación vaga de malestar en la parte superior del abdomen o el vientre que se inicia, por lo general, después de comer.

Algunas personas lo relatan como calor o ardor en la zona entre el ombligo y la parte inferior del esternón, o una sensación de llenura que molesta poco después de comenzar o al terminar de comer. Una de las causas se debe a comer en exceso o muy rápido.

 Diarrea del viajero

Cada vez que viajes, sobre todo a lugares con otras costumbres o comidas, es importante llevar un botiquín que incluya medicamentos para el dolor de estómago o diarrea. Esta última se caracteriza por la presencia de heces sueltas y acuosas debido al consumo de agua no potable o producto de la mala manipulación de los alimentos que ingeriste.

Para disminuir sus síntomas, la persona se debe hidratar y consumir soluciones orales que venden en la farmacia, además de preferir comidas más pequeñas y saladas. Si se da en niños, es importante consultar con un médico, especialmente si se reduce la orina, hay resequedad en la boca, ojos hundidos y pocas lágrimas al llorar.

Si bien, con las causas ya mencionadas puedes experimentar muchas molestias y dolor, existen otras patologías que requieren una ida inmediata al Servicio de Urgencia. ¿Cuáles son?

Apendicitis

La apendicitis causa dolor en el abdomen bajo derecho. Si bien, en la mayoría de las personas comienza con un dolor alrededor del ombligo, a medida que pasa el tiempo, la inflamación empeora y se extiende a un costado, por lo que el dolor de hace mucho más intenso.

¿Cómo diferenciarla de otras? El dolor empeora al toser, caminar o realizar movimientos bruscos. También puede causar náuseas y vómitos, pérdida del apetito, fiebre ligero o hinchazón. Es importante consultar debido a que se puede transformar en una peritonitis. Es decir, que el apéndice se perfore.

 Diverticulitis

Los divertículos son bolsas abultadas y pequeñas que se pueden formar, por lo general, en la parte inferior del intestino grueso o colon. Si estas o más bolsas se inflaman (diverticulitis) puede causar dolor abdominal intenso, fiebre, náuseas y un cambio en tus hábitos intestinales.

Cuando es leve, se puede tratar con reposo, cambios en la alimentación y medicamentos. Sin embargo, cuando se torna grave, requiere cirugía.

Cálculos renales

La dieta, el sobrepeso u obesidad pueden ser un factor de riesgo para los cálculos renales, depósitos duros hechos de minerales y sales que se forman dentro de los riñones.

Expulsar estos cálculos puede ser muy molesto, causando dolor punzante e intenso en los costados o en la espalda o debajo de las costillas, el que se conoce como cólico renal. Este dolor se propaga hacia la parte baja del abdomen y la ingle, además, va y viene, provocando también dolor o sensación de ardor al orinar.

Otros signos puede ser orina de otro color o con un olor desagradable, además de náuseas, vómitos, fiebre o escalofríos.

Hernia abdominal

La causa de una hernia abdominal se relaciona con defectos congénitos, complicaciones posteriores a una cirugía o falta de colágeno, enzima que le da resistencia a la pared abdominal.

El signo principal es un dolor específico en la zona y/o nota un bulto en el abdomen. Cabe mencionar que el tratamiento es siempre quirúrgico.

 Ataque a la vesícula

Si después de una comida abundando o rica en grasas experimentas mucho dolor, puede ser un ataque de vesícula biliar, dolor que puede ir y venir.

Los síntomas más característicos son dolor intenso en la parte central o superior derecha, molestia o dolor fuerte al palpar el abdomen, náuseas, vómitos o fiebre.

 Pancreatitis

La inflamación del páncreas puede aparecer con dolor en la parte alta del abdomen que se extiende hasta la espalda y que empeora después de comer. También se puede dar con fiebre, pulso acelerado, náuseas, vómitos y sensibilidad al tocar el estómago.

Cuando esta se torna crónica, los signos más comunes son dolor en la parte alta del abdomen, pérdida de peso y heces aceitosas con mal olor.

 Enfermedad inflamatoria intestinal

La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa son enfermedades invalidantes si no son tratadas adecuadamente. Cuando no es diagnosticado, tiende a confundirse con colon irritable, sin embargo, estos síntomas nunca desaparecen. Entre ellos, se destacada dolor abdominal, baja de peso, sangrado en las deposiciones, anemia y diarrea.

 Úlceras en el estómago

Las úlceras pépticas son llagas o heridas abiertas que aparecen en el revestimiento interno del estómago y la parte superior del intestino delgado que se descubre a través de una endoscopía.

Los síntomas más comunes son dolor de estómago, hinchazón, eructos, acidez o náuseas producidas, generalmente, por la bacteria helicobacter pylori o por el uso prolongado de antiinflamatorios no esteroides. El estrés o las comidas sazonadas no producen úlceras, pero las pueden empeorar.

 Cáncer de estómago

El cáncer gástrico puede atacar cualquier zona del estómago que produce síntomas como dificultad para tragar, sensación de hinchazón o saciedad después de comer, acidez, indigestión, náuseas, vómitos y pérdida de peso involuntaria.

Entre los factores de riesgo está la obesidad, enfermedad por reflujo, antecedentes de este tipo de cáncer en la familia, tabaquismo, pólipos gástricos, infección por Helicobacter Pylori o una dieta baja en frutas y verduras.

Cáncer de colon o recto

El cáncer colorrectal suele partir con pólipos benignos que se forman en el interior del colon y que, con el tiempo, pueden convertirse en malignos. Los síntomas suelen confundirse con otras afecciones, por lo que es importante consultar con un médico para realizarse exámenes y descartar cualquier patología grave.

Algunos de ellos son períodos de diarrea o estreñimiento, sangrado rectal, heces oscuras, sensación de querer evacuar y no sentir alivio al hacerlo, calambres, debilidad y fatiga.

Aneurisma aórtica abdominal

Se produce cuando la aorta (principal vaso sanguíneo del cuerpo) se ensancha o abulta en el abdomen. Si bien, no provoca ningún síntoma en un inicio, si el aneurisma se expande o rompe requiere atención inmediata porque puede ser mortal. Cuando esto pasa, causa sudor frío, vértigo, desmayo, náuseas y vómitos, frecuencia cardíaca rápida, shock.

Oclusión o bloqueo intestinal

Se trata de un bloqueo que no permite que pase la comida ni el líquido a través del intestino delgado o grueso. Su tratamiento debe ser inmediato y las causas pueden incluir adherencias en los tejidos formadas después de una cirugía, hernias, cáncer de colon, algunos medicamentos, la enfermedad de Crohn o la diverticulitis.


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