Hígado graso ¿qué alimentos debo evitar?

Fecha de Publicación: 25 Marzo 2022
Tiempo de Lectura: 3 Min.

Una mala alimentación, exceso de bebidas alcohólicas y una vida sedentaria, podría afectar a nuestro hígado. Un órgano importantísimo que ayuda a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas del organismo. ¿Cómo reconocer cuando está en mal estado? Te lo explicamos a continuación.

No es fácil darnos cuenta cuando nuestro hígado está en mal estado, ya que generalmente no presenta síntomas.

En general, se suele conocer el estado del hígado mediante analíticas convencionales, las cuales incluyen indicadores hepáticos que muestran si existen alteraciones enzimáticas y, en ocasiones, puede ser necesaria una ecografía para detectar enfermedades como el hígado graso, que suele ser asintomática.

¿Qué es hígado graso?

En primer lugar, hay que dejar claro en qué consiste esta enfermedad. Es importante hacer distinción entre el hígado graso alcohólico causado principalmente por el consumo excesivo de alcohol y el no alcohólico.

La primera se debe al elevado consumo de alcohol. Este órgano se ocupa de descomponer la mayor parte del alcohol que se ingiere para eliminarlo del cuerpo, pero este proceso puede generar sustancias dañinas que dañan las células del hígado, provocan inflamación y debilitan las defensas naturales del cuerpo. Esto puede provocar hepatitis alcohólica y cirrosis.

En el caso del hígado graso no alcohólico, no está relacionada con el consumo de bebidas con grado etílico y, tal como lo informa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, existen dos tipos:

  • Hígado graso simple: Cuando hay grasa en el hígado, pero poca o ninguna inflamación o daño en las células de este.
  • Esteatosis hepática no alcohólica: existe inflamación, daños y grasa en las células del hígado. La inflamación y el daño de las células pueden provocar fibrosis o cicatrización del hígado. La esteatosis puede causar cirrosis o cáncer de hígado.

¿Cuáles son los factores de riesgo del hígado graso no alcohólico?

Según el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales de USA, establece los principales factores que pueden causar la enfermedad del hígado graso no alcohólico, los cuales pueden ser:

  • Sobrepeso
  • Resistencia a la insulina o diabetes tipo 2
  • Concentraciones anormales de grasas en la sangre
  • Síndrome metabólico
  • Pérdida rápida de peso y mala dieta

La enfermedad del hígado graso por alcohol solo ocurre en personas que beben mucho, especialmente en aquellas que ha estado bebiendo durante un largo período de tiempo.

¿Qué alimentos están prohibidos en una dieta para hígado graso?

Existen una serie de alimentos que son especialmente perjudiciales para mantener este órgano en buen estado

Expertos recomiendan que se deben aplicar cambios en la dieta como:

  • Limitar la ingesta de grasas
  • Reemplazar las grasas saturadas y trans por insaturadas
  • Comer más alimentos con un índice glucémico bajo
  • Evitar alimentos y bebidas que contengan grandes cantidades de azúcares simples o bebidas alcohólicas.

¡Lo que debes evitar!

Alcohol

Es considerado el gran enemigo del hígado. No solo provoca el hígado graso alcohólico, sino que también lo puede dañar más en caso de tener enfermedad de hígado graso no alcohólico. Esto se debe a que, al metabolizarse en el hígado, provoca un incremento de triglicéridos y puede generar sustancias dañinas que dañan las células del hígado.

Azúcar

Una dieta rica en azúcar contribuye a que la grasa se deposite en el hígado y cause inflamación.

Sal

Un consumo excesivo de sal puede ocasionar retención de líquidos y, por ende, un aumento de peso. Esto obliga al hígado a trabajar por encima de sus niveles normales y puede conducir a enfermedades hepáticas.

Carne roja

La carne roja contiene grasas saturadas, las cuales favorecen el desarrollo del hígado graso. Así pues, su consumo debe ser moderado y se recomienda priorizar la carne blanca, como puede ser el pavo o el pollo.

Embutidos

Los embutidos, igual que la carne roja, contienen una gran cantidad de grasas saturadas, un exceso de la cual se relaciona directamente con un aumento de probabilidades de padecer hígado graso.

Lácteos con leche entera

Si se padecen problemas de hígado es recomendable tomar lácteos 0% materia grasa, ya que la grasa de estos es saturada y es muy perjudicial para el hígado. Además, los quesos como el gouda, el brie, el emmental o el parmesano estarían prohibidos para el hígado graso, ya que son los que más grasas saturadas y colesterol tienen.

Bollería industrial

Los ultraprocesados son alimentos perjudiciales para la salud en general y, en el caso del hígado, contribuyen a la acumulación de grasa visceral alrededor de este, lo cual se relaciona con la obesidad y el sobrepeso.

Recuerda siempre que antes de tomar cualquier decisión en temas de salud, primero debes acudir a un especialista para tener un diagnóstico correcto y, por supuesto optar al tratamiento indicado.


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